El Senado aprueba modificaciones a la Ley de Alquileres, ¿cómo afectarán a inquilinos y propietarios?
En una sesión que se prolongó hasta altas horas de la madrugada, el Senado de la Nación argentina aprobó las modificaciones a la Ley de Alquileres. Con 37 votos a favor y 29 en contra, la iniciativa regresa a la Cámara de Diputados para su segunda revisión.
Estas modificaciones, que generaron un amplio debate, fueron respaldadas por los senadores que integran el bloque de Unidad Federal, mientras que Juntos por el Cambio votó en contra, prolongando aún más la reforma de una ley en medio de la parálisis que afecta al sector inmobiliario.
La senadora mendocina Anabel Fernández Sagasti, del Frente de Todos, defendió las propuestas del oficialismo y destacó la importancia de abordar el tema de los inquilinos, que afecta a aproximadamente 10 millones de personas. Sin embargo, también reconoció que el proyecto actualmente en discusión genera incertidumbre y paralización de los contratos de alquiler.
El proyecto oficialista busca mantener contratos de alquiler con una duración de tres años y ajustar los precios semestralmente utilizando la fórmula Casa Propia, que considera la variación salarial y la inflación del último año. Además, los contratos se realizarán en moneda nacional, y se ofrecen incentivos fiscales para propietarios que alquilen sus viviendas.
Sin embargo, existen preocupaciones en el mercado inmobiliario sobre el impacto de estas reformas. Marta Liotto, presidenta del Colegio Profesional Inmobiliario de Buenos Aires, considera que el proyecto es perjudicial y podría reducir la oferta formal de alquileres a cero mientras aumenta los precios.
Por otro lado, la propuesta opositora, que ya fue aprobada en la Cámara de Diputados, se basa en el principio del libre acuerdo entre las partes y contratos de dos años de duración, con la posibilidad de elegir un índice de ajuste a elección de las partes, como el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
La reforma de la Ley de Alquileres en Argentina sigue siendo un tema de debate intenso y regresará a la Cámara de Diputados para su revisión final. Mientras tanto, el mercado inmobiliario enfrenta desafíos significativos, incluida una reducción drástica en la oferta de viviendas para alquilar en la ciudad de Buenos Aires y precios en constante aumento.
