Un vuelo de Air Europa experimentó una severa turbulencia que provocó lesiones en 30 pasajeros, obligando a un aterrizaje de emergencia en Natal, Brasil. Los testimonios narran momentos de terror a bordo.
Un vuelo de Air Europa se vio obligado a realizar un aterrizaje de emergencia en Natal, Brasil, durante la madrugada del 1 de julio, luego de que una intensa turbulencia causara heridas a 30 pasajeros. El Boeing 787-9 Dreamliner, con matrícula EC-MTI, cubría la ruta entre Madrid, España, y Montevideo, Uruguay, cuando fue alcanzado por la turbulencia en el Océano Atlántico, cerca de la costa brasileña.
El incidente se produjo cuando el avión ya estaba cerca de la costa brasileña, lo que llevó a la tripulación a desviar la aeronave hacia el aeropuerto más cercano y adecuado, Natal. Según reportes del portal especializado Aviacionline, la turbulencia fue tan fuerte que varios paneles superiores de la cabina cayeron, y los pasajeros sufrieron heridas de diversa consideración.
A las 2:30 de la madrugada, el avión aterrizó en Natal, donde una operación de emergencia con decenas de ambulancias se organizó rápidamente para atender a los heridos. La mayoría de los afectados presentaron “escoriaciones y traumatismos leves”, según informó la secretaría de salud del estado de Río Grande del Norte. Sin embargo, once personas permanecían hospitalizadas el lunes por la tarde, distribuidas entre clínicas privadas y el hospital Monsenhor Walfredo Gurgel.

Entre los heridos se encuentran ciudadanos de España, Argentina, Uruguay, Israel, Bolivia y Alemania. Testimonios de pasajeros, como el del psicólogo uruguayo Claudio Fernández Arbes, describieron escenas de caos y terror a bordo. “No fue una turbulencia, fue una caída en picada. No es que el avión se sacudió: cayó”, relató Fernández Arbes a la agencia AFP. Otros pasajeros compartieron videos en redes sociales mostrando a un hombre descendiendo del compartimiento superior de equipaje, evidenciando la magnitud de la turbulencia.
En un comunicado, Air Europa confirmó el incidente, asegurando que el avión aterrizó de manera segura y que todos los heridos habían recibido atención médica. La aerolínea también informó que otro avión partiría desde Madrid para rescatar a los pasajeros y llevarlos a su destino final en Montevideo. “La aeronave aterrizó con total normalidad, pero permanecerá en revisión para determinar el alcance de los daños registrados”, indicó la compañía.
La falta de comunicación de la aerolínea tras el incidente fue criticada por los pasajeros. Fernández Arbes expresó su frustración: “No venía nadie a decirnos nada, no sabíamos nada”. Otros pasajeros, como Mariela Jodal, quien afirmó estar entre los afectados, destacaron la importancia de tener el cinturón de seguridad abrochado, lo que la salvó de mayores lesiones durante la turbulencia.
