Donald Trump, ex presidente de los Estados Unidos, sorprendió nuevamente a la comunidad internacional al declarar que se encuentra ultimando un acuerdo para poner fin a la guerra en Gaza. Según sus palabras, existe un “entendimiento” que podría terminar con el prolongado conflicto en la Franja, aunque las negociaciones continúan siendo, en muchos aspectos, inciertas y sujetas a la aceptación de todas las partes involucradas.
El ex mandatario norteamericano brindó declaraciones a la prensa tras una breve visita a Nueva York, enfatizando que su administración trabaja en una solución que, según él, “será muy buena para Gaza”. Trump aseguró que Israel habría aceptado los términos de su propuesta y lanzó una advertencia final a Hamas para que acepte sus condiciones, anticipando “consecuencias” si la organización rechaza el ofrecimiento. Sin embargo, hasta el momento, el gobierno israelí no ha confirmado de manera oficial que haya refrendado el plan presentado por Trump.
La propuesta delineada por Trump prevé la liberación de los 48 rehenes restantes por parte de Hamas en el primer día de cese del fuego, a cambio de la excarcelación de aproximadamente 3.000 prisioneros palestinos por parte de Israel. Además, uno de los puntos destacados del plan sería el compromiso israelí de no ingresar a la ciudad de Gaza durante este proceso. Trump anunció que supervisaría personalmente las negociaciones hacia un acuerdo final y duradero que ponga fin a la guerra en la región.

Curiosamente, distintos informes señalan que este plan fue elaborado por Trump y su enviado especial Steve Witkoff durante un partido de golf. El contenido del mismo habría llegado a Hamas no a través de los tradicionales mediadores de Catar y Egipto, sino mediante mensajeros alternativos, incluyendo un activista israelí por la paz y un empresario palestino-estadounidense. Esto ha generado dudas respecto a la transparencia y representatividad de las negociaciones, así como incógnitas sobre la coordinación con los actores regionales.
Desde el lado palestino, Hamas confirmó haber recibido “ideas” para terminar el conflicto y declaró estar dispuesto a sentarse a negociar bajo la condición de un cese total de las hostilidades, la retirada israelí de Gaza, y la creación de un comité administrativo compuesto por independientes palestinos. Observadores internacionales advierten que, a pesar de la retórica optimista de Trump, el camino hacia la paz sigue plagado de desafíos, desconfianzas y rivalidades, y que las últimas iniciativas traen consigo tanto esperanza como escepticismo.
