El Presidente Alberto Fernández anuncia la entrada oficial de Argentina en la alianza de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, un paso estratégico hacia la consolidación y el crecimiento global.
En una jugada política trascendental, el Presidente Alberto Fernández anunció esta mañana que Argentina se une a la Alianza BRICS, compuesta por las economías emergentes más influyentes: Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. La alianza, que representa un cuarto del PBI mundial, marca un nuevo capítulo en la búsqueda del país por una inserción activa y fructífera en el escenario internacional.
Desde la Quinta Presidencial de Olivos, Fernández destacó que la decisión de unirse a los BRICS subraya el compromiso de Argentina con la apertura al mundo y el desarrollo en conjunto. Esta integración estratégica tiene como objetivo primordial aumentar las oportunidades comerciales, fomentar inversiones y facilitar el acceso a nuevas tecnologías.
El Presidente subrayó que, en medio de un contexto global desafiante, la alianza BRICS se convierte en un actor crucial en la configuración de la arquitectura financiera y geopolítica del mundo. Con un cuarto del PBI mundial bajo su influencia y un peso relevante en las exportaciones e importaciones, los BRICS poseen la capacidad de influir en la dinámica económica y política internacional.
En términos de comercio exterior, los BRICS ya representan el 30% del destino de las exportaciones argentinas, lo que destaca el potencial para aumentar aún más la capacidad exportadora del país hacia estos mercados y sus socios secundarios. Además, Fernández resaltó la importancia de que los BRICS lideren esfuerzos globales como la erradicación del hambre y la pobreza para el 2030, un aspecto en el que Argentina puede contribuir con su potente agroindustria y biotecnología.
El Presidente enfatizó que la incorporación de Argentina a la alianza BRICS no impide la continuación de sus compromisos con instancias multilaterales como las Naciones Unidas y resaltó que la alianza brinda apoyo a la búsqueda de una solución pacífica y negociada para la disputa de soberanía en las Malvinas.
Fernández concluyó su discurso reafirmando el compromiso de Argentina con la justicia y el bienestar de su población, y destacó que la política exterior del país seguirá buscando oportunidades de integración que impulsen el crecimiento en beneficio de todos los argentinos.
