El Papa Francisco, de 88 años, ha sido hospitalizado en el Policlínico Agostino Gemelli de Roma debido a una bronquitis que lo ha afectado desde principios de mes. La noticia se confirmó a través de un comunicado oficial de la Santa Sede, que anunció que la agenda del pontífice quedará suspendida al menos hasta el lunes.
El Papa Francisco, quien ha estado padeciendo dificultades respiratorias, se vio obligado a cancelar sus audiencias y otros eventos programados. Aunque ha continuado con sus actividades diarias en su residencia en Casa Santa Marta, las audiencias han tenido lugar en su interior para evitar exponerlo a las bajas temperaturas del invierno romano. El miércoles pasado, el Papa anunció que padecía un “fuerte resfriado” y se disculpó por no poder leer su catequesis en la Audiencia General, lo que posteriormente se confirmó como una bronquitis.
Antes de ser hospitalizado, el Papa Francisco recibió en audiencia al Primer Ministro de Eslovaquia, Robert Fico, y envió un saludo a los miembros de la Fundación Gaudium et Spes. Sin embargo, su condición se deterioró rápidamente, y el viernes pasado, tras sus audiencias matinales, fue ingresado en el Policlínico Gemelli para someterse a pruebas diagnósticas necesarias y continuar su tratamiento en un entorno hospitalario.
La bronquitis ha sido un problema recurrente para el Papa Francisco. En junio de 2023, estuvo hospitalizado por una operación de hernia abdominal y en diciembre de ese año renunció a participar en la COP28 de Dubái debido a una bronquitis. Además, en marzo de 2024, anuló su participación en el Viacrucis del Coliseo de Roma por sus problemas de salud. Esta es la cuarta vez que el Papa ha sido hospitalizado en el Policlínico Gemelli, lo que refleja la complejidad de sus problemas de salud.
La Santa Sede ha anunciado que la Audiencia Jubilar prevista para este sábado, la Misa del Jubileo de los artistas y del mundo de la cultura del domingo, y el encuentro con los artistas previsto para el lunes serán cancelados debido a la imposibilidad del Papa de asistir. En su lugar, un cardenal presidirá la misa del domingo, y el prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación, el cardenal José Tolentino de Mendonça, lo hará en la Audiencia Jubilar. La situación del Papa Francisco es monitoreada de cerca por los médicos y el personal del Vaticano, quienes esperan que su recuperación sea lo más rápida posible.
