El Papa León XIV se ofrece a mediar entre líderes mundiales para poner fin a las guerras: “El pueblo quiere la paz”
En un llamado a la unidad y la reconciliación, el Papa León XIV se ha ofrecido a mediar entre los líderes mundiales para poner fin a las guerras que afectan a diversas regiones del planeta. En una audiencia especial, el pontífice destacó que “el pueblo quiere la paz” y que las armas no resuelven los problemas.
Durante su discurso, el Papa recordó que las Iglesias orientales han experimentado los horrores de la guerra de manera directa, como lo ha expresado el Papa Francisco al referirse a ellas como “Iglesias mártires”. Enumeró algunas de las regiones más golpeadas por la violencia, desde Tierra Santa hasta Ucrania, pasando por Líbano, Siria, Tigray y el Cáucaso. “Cuánta violencia”, enfatizó, “cuántas vidas jóvenes se pierden en nombre de la conquista militar”.
El Papa León XIV también dirigió un mensaje especial a los cristianos de Oriente Medio, instándolos a resistir la guerra, la marginación y la persecución. “Deben tener la oportunidad, no solo con palabras, de permanecer en sus tierras natales con todos los derechos necesarios para una existencia segura”, pidió ante los aplausos del público. Este llamado a la resistencia y a la lucha por los derechos humanos es un reflejo de la preocupación del Vaticano por la situación de los cristianos en zonas de conflicto.

En un contexto global donde los conflictos parecen inminentes, el Papa León XIV ha invitado a rezar por el milagro de la paz. “Pero, ¡cuántos otros conflictos hay en el mundo!”, expresó. “Confío esta sentida súplica a la Reina de la Paz, para que la presente al Señor Jesús y nos obtenga el milagro de la paz”. Este llamado a la oración es un recordatorio de que, en momentos de crisis, la fe y la esperanza pueden ser fundamentales para encontrar soluciones pacíficas.
El ofrecimiento del Papa León XIV de mediar entre los líderes mundiales es un gesto de buena voluntad que busca abordar los problemas globales desde una perspectiva de reconciliación y paz. En un mundo donde las divisiones y los conflictos parecen cada vez más profundos, la voz del Vaticano resuena como un llamado a la unidad y a la búsqueda de soluciones pacíficas. “Luchemos por la paz”, concluyó el Papa, “y recemos por esta reconciliación que es el verdadero milagro de la paz”.
